Numerosos talleres de Glasspoint consideran abusivas las condiciones de franquiciado Cristalbox y no creen en la rentabilidad que prometen desde Tudela

Las negociaciones entre Cristalbox y Glasspoint continúan y la intranquilidad y dudas se esta apoderando de muchos talleres de Glasspoint.

A esta redacción han llegado llamadas y mails de talleres de Glasspoint en los que expresan su malestar por las que consideran “condiciones abusivas” de la franquicia Cristalbox. Creen muchos de estos talleres que si entran en esta red de franquicias perderán un alto nivel adquisitivo y que no compensará el desembolso inicial y mensual para formar parte de un negocio que no garantiza la rentabilidad.

Algunos talleres nos han transmitido su desacuedo con la posibilidad de pagar un tanto por ciento de sus trabajos cuando son ellos lo que se ganan diariamente la confianza de corredores, agentes y mediadores y que los conciertos de Cristalbox no compensan los coches que pueden llegar a entrar. Por eso, empresarios de Glasspoint siguen llamando con fuerza a las puertas de otras redes en las que las condiciones no minarán financieramente de esa manera a los talleres.

A estos talleres no les salen las cuentas y cree que Cristalbox se beneficiará de su trabajo y esfuerzo a cambio de nada, o de muy poco, que es poner el roturo amarillo en su puerta. No se creen el discurso (ver vídeo) que transmiten desde la compañía de Javier Celaya.

Cristalbox alude a su fortaleza como marca y argumenta que sus altísimo desembolso en publicidad en Fórmula 1 les ha hecho ser una referencia y que eso les traerá clientes pero puestos al habla con una agencia de medios publicitarios no confirman que ña única compañía que logra retornar dinero con sus anuncios es Carglass y es la única empresa que se pide expresamente cuando se llama a los call center de las compañías, el resto de clientes en nuestro sector llegan por el trabajo diario de los profesionales de taller de cada población.

Lo que se preguntan en muchos talleres de Glasspoint es si compensa pagar un 8% de su trabajo, por ejemplo, cuando el 90% de los coches seguirán llegando por su labor de convencimiento de sus virtudes a corredurías, agentes y mediadores.