La verdadera razón por la que Glassdrive ha abierto un taller en el parking de Uber en Madrid que no va a gustar nada al resto de centros de la red en esa provincia

Hace una semana contactaban con INFOLUNA varios franquiciados de Glassdrive extrañados por el anuncio desde su central de una nueva instalación de la red multinacional francesa en Madrid capital. A estos profesionales no les cuadraba que se decidiera una apertura en una ciudad en la que tras la apertura hace 14 meses de la red Aurgi Glass propiedad de la aseguradora Mutua Madrileña se ha complicado enormemente la supervivencia futura de muchos talleres de todas las redes de lunas.

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Desde INFOLUNA coincidíamos en esa extrañeza, por lo que comenzamos a investigar la verdadera razón de la llegada de este nuevo taller de Glassdrive en un momento muy complicado para lograr hacer rentable un taller de lunas en Madrid.

El taller se encuentra en el barrio madrileño de Vicálvaro dentro del recinto donde duermen cada día cientos de vehículos de Uber, la compañía de transporte de personas que lleva años trabajando en la capital de España.

Su ubicación es también extraña, ya que se encuentra a las afueras de Madrid, en una zona sin paso de vehículos particulares y sin transporte público cercano para trasladarse al domicilio en caso de acudir a resolver un siniestro de lunas.

Este taller de Glassdrive está integrado dentro de las instalaciones de un taller de chapa y pintura con larga trayectoria denominado M-45. El espacio es de más de 300 metros cuadrados y trabaja de manera coordinada con el especialista de chapa, que es quien le deriva el trabajo.

Glassdrive ha cerrado un acuerdo con el taller de chapa y pintura M45 para aprovechar su fortaleza en el sector de flotas y renting. M45 necesitaba ampliar sus servicios y Glassdrive le ofrece la oportunidad de mejorar su facturación con la cristalería del automóvil. 

De esta manera, ambos talleres ganan pero pierden todos los talleres de la red francesa en Madrid, ya que verán cómo el volumen de trabajo de vehículos de renting se desplomará en el futuro.

Madrid se ha convertido en la provincia más complicada para captar siniestros de lunas, ya que el 50% de las pólizas de autos son propiedad de Mutua Madrileña, que deriva todo el trabajo posible a su propia red. Si es difícil conseguir siniestros de lunas de asegurados de Mutua Madrileña y un taller de la red va a absorber una gran cantidad de siniestros de renting, la situación de los centros de Glassdrive se puede volver desesperada a medio plazo.

Los talleres de Glassdrive en Madrid con los que hemos contactado considera que esta es "una jugada sucia" y que decisiones como esta no vienen "para ayudar a los talleres madrileños de la red".