Análisis del sector (Semana 2): "Están formados los profesionales que trabajan en el sector?

El sector de la cristalería del automóvil tiene, como todos los sectores, tiene grandes profesionales, los más, y profesionales discretos, pero eso es una realidad de la vida en cualquier sector profesional.

El gran problema de nuestro sector es el vacío en la formación. Se aprende sobre la marcha y se consigue llegar a ser un gran montador o un gran reparador, pero nuestro sector en muchos talleres funciona como la España de los 60, es decir, se aprende trabajando. Muchos chavales son contratados sin tener una formación adecuada y se les va enseñando día a día. El problema es de raiz, la FP de automoción no se centra en la cristalería del automóvil como uno de sus ejes y se trabaja sobre ella de manera residual. Los chicos y chicas salen de FP automoción con ligeras ideas pero sin una formación adecuada.

Ser montador y reparador de lunas no tiene nada que ver con lo que ra hace 20 años. El vidrio es una las partes del coche que más ha evolucionado. El vidrio llega con un valor añadido en forma de tecnología que precisan de un conocimiento y la reparación se ha convertido en algo clave en este negocio y ahí es donde hay que incidir más en la formación.

Hacer un buen trabajo en este sector tanto en montaje como reparación no es tan fácil como se piensan muchos. El cliente y asegurado se ha vuelto más intrasigente con un fallo, por mínimo que sea y hay que evitar la más mínima queja o reclamación. Para eso se necesita tener personal formado. ¿Cómo formarlos? Ese es un problema ya que son escasas las posibilidades. Actualmente sólo hay dos centros como son Cesvimap y Centro Zaragoza que ofrezcan cursos para los profesionales de la cristalería del automóvil. Son buenos cursos aunque cortos de duración. Debería ser de obligado cumplimiento por parte de los talleres que mandaran a sus empleados a realizar estos cursos. Se trataría de la mejor inversión de futuro del negocio, ya que realizar malos trabajos por falta de formación y conocimiento repercutiría muy negativamente en la imagen y desarrollo futuro de la empresa.

Nos consta que algunas redes están inviertiendo cada vez más en la formación de sus profesionales con cursos presenciales y online. El vidrio es ya una pieza de tecnología avanzada del automóvil, un elemento de seguridad activa y saber tratarlo es fundamental. Las compañías buscan cada vez más el servicio y la excelencia en un paquete único y no sería de extrañar que en poco tiempo se exija reparadores con el aval de haber realizado algún curso que no sea el " de la vida y la experiencia" como se suele decir vulgarmente. Los reparadores y montadores de vidrio deben ser profesionales que aprendan y estudien cómo evoluciona su sector porque 65.000 referencias de vidrio, sensores cada vez más sofisticados y lunas cada vez más complicadas necesitan de profesionales que conozcan sus características en profundidad.

Insistimos mucho en la custión ¿quién tiene futuro en el sector? Una de las claves será el que esté mejor formado. Porque los mejores formados darán el mejor servicio en un futuro en el que los coches de gama media y media.baja comenzarán a montar vidrios como los de alta gama.