Análisis del sector (Semana 2): ¿Saben los profesionales del sector trabajar todo tipo de vidrios?
Se trabaja muy bien pero estancarse y no formarse sería un error que se pagará caro
Como hemos dicho en otros artículos, el sector tiene muchísimos
profesionales que se preocupan por mejorar sus conocimientos, que
aprenden cada día y que son magníficos en el manejo del vidrio del
automóvil, pero existe una tendencia a pensar en muchos casos que el
vidrio no tiene excesiva complicación, que puesto uno puestos todos y
las cosas están cambiando a pasos agigantados. Es cierto que las
compañías reciben poquísimas reclamaciones sobre talleres de lunas y
muchas más de talleres de chapa y eso es una gran ventaja para los
especialistas.
Los fabricantes de vidrio y del automóvil están
echando una mano al sector al complicar cada vez más el vidrio porque
consiguen que un taller de chapa no se atreva a manejar esos vidrios por
miedo o hacer el ridículo. Así que hay que ponerse las pilas y que el
buen trabajo que se realiza actualmente no se deteriore por no seguir
formándose. En España hay muy buenos profesionales pero debemos comenzar
a pensar que el aprendizaje autodidacta ya no basta y hay que ser lo
más perfeccionistas posibles para ser uno de los cristaleros que estará
en el futuro en un panorama más reducido de talleres.
El vidrio
vienen cada vez con mayor valor añadido y su manejo requiere cada vez de
mejor formación. Es relativamente fácil tener un error si no se conoce
bien el vidrio que se maneja, lo que tiene añadido en cuestión de vidrio
reflectante, térmico, acústico etc...A eso hay que añadir los sensores
que se están insertando y que convierten el vidrio en una pieza
inteligente del vehículo.
No decimos qe haya que conocer las
65.000 referencias del mercado o las 15.000 más utilizadas en España
pero sí es necesario conocer muchos aspectos que con buena formación y
un buen conocimiento evitarán quejas y reclamaciones. En los foros de
coches leemos cada vez más comentarios sobre cómo han tratado su luna en
uno u otro sitio, que no se fían de que se carguen elementos del
parabrisas etc...Son comentarios de gente con escasa base para opinar
pero con buen conocimiento y buena formación se evitará crear la leyenda
urbana de que los talleres d elunas se cargan los parabrisas de alta
tecnología.
Tener manuales de formación y de uso de los
parabrisas dotados de alta tecnología debe ser una condición
indispensable en los talleres.
Donde más se puede notar un mal
profesional es en la reparación. En ese terreno cada vez hay más
especialistas en España, pero sigue siendo un terreno menos conocido
porque durante años muchos talleres pensaban que jamás triunfaría este
tipo de trabajo. En la reparación es donde el cliente es mas
quisquilloso y donde más se fija, así que hay que incidir más aún en ese
trabajo y ser lo más minucioso posible en su desarrollo.
Como hemos dicho en otros artículos, el sector tiene muchísimos
profesionales que se preocupan por mejorar sus conocimientos, que
aprenden cada día y que son magníficos en el manejo del vidrio del
automóvil, pero existe una tendencia a pensar en muchos casos que el
vidrio no tiene excesiva complicación, que puesto uno puestos todos y
las cosas están cambiando a pasos agigantados. Es cierto que las
compañías reciben poquísimas reclamaciones sobre talleres de lunas y
muchas más de talleres de chapa y eso es una gran ventaja para los
especialistas.
Los fabricantes de vidrio y del automóvil están
echando una mano al sector al complicar cada vez más el vidrio porque
consiguen que un taller de chapa no se atreva a manejar esos vidrios por
miedo o hacer el ridículo. Así que hay que ponerse las pilas y que el
buen trabajo que se realiza actualmente no se deteriore por no seguir
formándose. En España hay muy buenos profesionales pero debemos comenzar
a pensar que el aprendizaje autodidacta ya no basta y hay que ser lo
más perfeccionistas posibles para ser uno de los cristaleros que estará
en el futuro en un panorama más reducido de talleres.
El vidrio
vienen cada vez con mayor valor añadido y su manejo requiere cada vez de
mejor formación. Es relativamente fácil tener un error si no se conoce
bien el vidrio que se maneja, lo que tiene añadido en cuestión de vidrio
reflectante, térmico, acústico etc...A eso hay que añadir los sensores
que se están insertando y que convierten el vidrio en una pieza
inteligente del vehículo.
No decimos qe haya que conocer las
65.000 referencias del mercado o las 15.000 más utilizadas en España
pero sí es necesario conocer muchos aspectos que con buena formación y
un buen conocimiento evitarán quejas y reclamaciones. En los foros de
coches leemos cada vez más comentarios sobre cómo han tratado su luna en
uno u otro sitio, que no se fían de que se carguen elementos del
parabrisas etc...Son comentarios de gente con escasa base para opinar
pero con buen conocimiento y buena formación se evitará crear la leyenda
urbana de que los talleres d elunas se cargan los parabrisas de alta
tecnología.
Tener manuales de formación y de uso de los
parabrisas dotados de alta tecnología debe ser una condición
indispensable en los talleres.
Donde más se puede notar un mal
profesional es en la reparación. En ese terreno cada vez hay más
especialistas en España, pero sigue siendo un terreno menos conocido
porque durante años muchos talleres pensaban que jamás triunfaría este
tipo de trabajo. En la reparación es donde el cliente es mas
quisquilloso y donde más se fija, así que hay que incidir más aún en ese
trabajo y ser lo más minucioso posible en su desarrollo.













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