El Ayuntamiento de La Laguna (Tenerife) hará inspecciones periódicas a talleres para comprobar si cumplen la ley

Los comercios y empresas de La Laguna tendrán que someterse a inspecciones técnicas periódicas para certificar ante el Ayuntamiento que cumplen las condiciones de seguridad, salubridad y legalidad especificas para cada actividad. 

Las empresas del municipio de La Laguna, desde cafeterías a talleres mecánicos, acreditarán que cumplen con la normativa a través de informes técnicos elaborados por profesionales independientes y con una periodicidad que van de cada dos años en el caso de actividades calificadas como peligrosas (que manejen residuos tóxicos o contaminantes) a cada nueve años en el caso de las inocuas (como bares o restaurantes).

Las infracciones que no sean subsanadas por parte de los propietarios acarrearán multas de entre 100 euros para las leves y los 1.500 euros para las muy graves. Se puede ejecutar una sanción accesoria que conlleva la suspensión de la licencia. El área de Urbanismo ha elaborado la nueva Ordenanza Reguladora de la Inspección Técnica de Actividades y, desde ayer, será objeto de consulta por parte de todos los ciudadanos. "Queremos que los profesionales y emprendedores afectados planteen sus ideas y opiniones y formulen sus alegaciones antes de su aprobación definitiva", explicó ayer el concejal encargado de este área en La Laguna, Juan Manuel Bethencourt.

Este documento nace, además, como una fórmula para "cerrar el círculo en torno al sistema de concesión de licencias para apertura mediante acto notificado". Gracias a esta ordenanza en vigor, los comercios y empresas laguneras pueden abrir con "total inmediatez" y esta nueva fórmula de inspecciones supone una forma de "corresponder a la confianza que les otorga esta administración".

La Laguna se convierte en el primer municipio canario en crear una norma de este tipo. Puede que sufra modificaciones antes de ser aprobada definitivamente. "Es voluntad de esta institución y del propio alcalde, Fernando Clavijo, que sea sometida a debate", aseguró Bethencourt.

Para el responsable de Urbanismo, estas inspecciones periódicas son el reflejo de una "apuesta por la modernización y la calidad". Descarta Bethencourt que este tipo de inspecciones supongan una carga económica excesiva para los empresarios. "Esta es una forma de garantizar la seguridad porque hay que recordar que las normas hay que cumplirlas, las inspecciones son nuevas pero el marco legal existe debe estar siendo aplicado ya", detalló el edil nacionalista.

Asimismo, este tipo de controles "también suponen una nueva oportunidad laboral para los profesionales autónomos, como ingenieros o arquitectos, que son los encargado legales de certificar las instalaciones".

Estarán sujetos a estas inspecciones todas las actividades sometidas a "cualquiera de los medios de intervención urbanística y licencia". El texto provisional de la ordenanza contempla como infracción grave el hecho de no presentar el certificado en el plazo correspondiente, por ejemplo.

Al igual que ocurre con los vehículos y la inspección técnica que deben pasar cada cierto tiempo en la Dirección General de Tráfico, las empresas tendrán que repetir las revisiones cada cierto tiempo. En el caso de las inocuas, la primera inspección se realiza a los nueve años de empezada la actividad, la segunda, tercera, cuarta y quinta en plazos de seis años entre cada una. Pasado este plazo, se presentarán en Urbanismo cada seis años.

Fuente: la opinión.es