Los concesionarios van a la desesperada y el Gobierno no les dejará ser juez y parte

La situación de los concesionarios es desesperada. El 80% de ellos ha sufrido pérdidas en 2011 y ya ni el taller les salva de la bancarrota, ya que no han sabido tratar la crisis y han tardado mucho en reaccionar y convertirse en negocios con buen servicio al cliente. Han pasado de despreciar al usuario a rendirse ante él, pero el cliente tiene memoria y eso les está pasando factura.

Solicitar liberalizar las ITV y ser ellos también quienes hacen la inspección técnica es una desfachatez absoluta. Como dicen las concesionarias de ITV, pasarían a ser juez y parte y se acabaría con la objetividad.

Para nuestro sector sería muy dañino, ya que serían los que decidirían si un parabrisas es o no apto. Por supuesto y dadas las necesidades económicas, se multiplicarían los parabrisas no aptos y con necesidad de sustitución, no de reparación, ya que su negocio está en la pieza de origen.

Esperemos que la administración no se pliegue a sus presiones y mantenga la actual estructura de ITV, por el bien de nuestro negocio, de la objetividad y del coste, ya que las aseguradoras deben estar temblando ante tal petición.