Este cristalero con 14 años de experiencia relata su visión de la profesión
Paco Villena (cristalero alicantino: “¿Se puede ser un profesional de la cristalería en 15 días? NO. Es ofensivo hasta formular la pregunta y la franquicia es consciente de que esto no es cierto”
Recientemente y por casualidad, estuve viendo
un programa de televisión que trataba sobre la actual situación económica y las
alternativas que buscaba la gente para subsistir, creando nuevas empresas. Mi
sorpresa vino al ver una franquicia de nuestro sector que les afirmaba a los
candidatos que con “15 días de práctica y enseñanza” en sus instalaciones,
estarían listos para trabajar... ¿cómooooo?, no es posible, lo habré entendido
mal, han dicho 15 días, si, si, 15 días.
![[Img #5189]](upload/img/periodico/img_5189.jpg)
He de reconocer que para desarrollar nuestra
profesión no es necesario especializarse en neurocirugía o ser ingeniero
aeronáutico, pero... echo la vista atrás y miro mi trayectoria personal y
visualizo por todo lo que he pasado en estos 14 años de profesión y veo que no
ha sido nada, pero que nada fácil este camino y
lo que es peor... lo que me
queda por “aprender” para ser el profesional que la mayoría queremos llegar a
ser. Pero para llegar a entender el porqué estos señores afirman semejante
barbaridad y qué intenciones tienen me he tenido que formular varias preguntas
e intentar responderlas:
¿Se puede ser un profesional de la
cristalería en 15 días? NO. Es ofensivo hasta formular la pregunta y no perderé
mucho tiempo en explicar todas las facetas de esta profesión, pero tanto por
tipología de cristales como de modelos de vehículos existentes en el mercado,
pasando por herramientas, procesos administrativos, etc. es evidente que es
técnicamente imposible y requiere de muchos años. Pero lo que es peor, la
franquicia es consciente de que esto no es cierto, ya que ellos suelen tener
talleres y conocen el tiempo que necesita una persona para aprender de forma
decente la profesión.
¿A quién le lanzan este mensaje? Al posible
franquiciado. A la persona que quiere emprender su propio negocio y van a
intentar convencerlo de lo “sencilla y fácil” que es esta profesión. Si son
capaces de decirles esto, qué no serán capaces de decir sobre acuerdos con
clientes, posibles facturaciones, márgenes de beneficios, etc. etc..
![[Img #5191]](upload/img/periodico/img_5191.jpg)
¿Por qué les dicen estas cosas? Por dinero.
Aunque todos trabajamos por dinero, creo que existe un código deontológico no
escrito que debemos de seguir o dicho de otro modo existen formas correctas y
formas incorrectas de conseguirlo. El franquiciado siempre “paga” y no poco,
por entrar a formar parte del grupo. Paga canon de entrada, paga por el stock
(que evidentemente le suele servir la franquicia o el proveedor de la misma),
paga royalties, etc. etc., con lo cual y aunque el franquiciado tenga que cerrar
su negocio, la franquicia siempre “gana”.
¿Podemos hacer algo nosotros, como
profesionales del sector? Seguir trabajando como verdaderos profesionales y
propagar que este trabajo tiene mucho de “especialización”, cuanto menos para
que se nos respete y para que la gente emprendedora que desee iniciarse en este
trabajo, que tiene todos mis respetos, sea consciente de la realidad y no se
dejen embaucar fácilmente.
¿Alguien puede hacer algo frente a estos
señores que actúan de esta forma? Mmmm, SI.
La verdad es que sí hay alguien, las
“compañías aseguradoras”. Porque las Cías. de seguros aconsejan a sus
asegurados que acudan a este o aquel profesional. En una póliza de hogar,
¿enviarían a un aprendiz de fontanero, si no va acompañado de un experto, a reparar
la avería a un asegurado?, en una póliza de salud, ¿dejarían que experimentara
un cirujano en sus primeras operaciones con sus asegurados?, entonces ¿por qué
en una póliza de autos dejan a sus clientes desamparados con algún determinado
taller de estas franquicias? es muy sencillo, por “desconocimiento”. En caso de
saberlo, no creo que quisieran aconsejar a sus asegurados, o mejor aún, llevar
su propio coche a un taller cuyo “técnico”, dejo claro que también es otra
víctima, tiene un bagaje profesional de 15 días.
En conclusión, la franquicia lanza el mensaje
engañoso a su futuro franquiciado, y a la compañía, a los cuales les vende que
su red está compuesta por verdaderos profesionales, como decía un conocido
mío... “la meto a la entrada y a la salida”.
Francisco Villena Callado
Cristalero “de profesión”
Recientemente y por casualidad, estuve viendo un programa de televisión que trataba sobre la actual situación económica y las alternativas que buscaba la gente para subsistir, creando nuevas empresas. Mi sorpresa vino al ver una franquicia de nuestro sector que les afirmaba a los candidatos que con “15 días de práctica y enseñanza” en sus instalaciones, estarían listos para trabajar... ¿cómooooo?, no es posible, lo habré entendido mal, han dicho 15 días, si, si, 15 días.
![[Img #5189]](upload/img/periodico/img_5189.jpg)
He de reconocer que para desarrollar nuestra
profesión no es necesario especializarse en neurocirugía o ser ingeniero
aeronáutico, pero... echo la vista atrás y miro mi trayectoria personal y
visualizo por todo lo que he pasado en estos 14 años de profesión y veo que no
ha sido nada, pero que nada fácil este camino y
lo que es peor... lo que me
queda por “aprender” para ser el profesional que la mayoría queremos llegar a
ser. Pero para llegar a entender el porqué estos señores afirman semejante
barbaridad y qué intenciones tienen me he tenido que formular varias preguntas
e intentar responderlas:
¿Se puede ser un profesional de la cristalería en 15 días? NO. Es ofensivo hasta formular la pregunta y no perderé mucho tiempo en explicar todas las facetas de esta profesión, pero tanto por tipología de cristales como de modelos de vehículos existentes en el mercado, pasando por herramientas, procesos administrativos, etc. es evidente que es técnicamente imposible y requiere de muchos años. Pero lo que es peor, la franquicia es consciente de que esto no es cierto, ya que ellos suelen tener talleres y conocen el tiempo que necesita una persona para aprender de forma decente la profesión.
¿A quién le lanzan este mensaje? Al posible franquiciado. A la persona que quiere emprender su propio negocio y van a intentar convencerlo de lo “sencilla y fácil” que es esta profesión. Si son capaces de decirles esto, qué no serán capaces de decir sobre acuerdos con clientes, posibles facturaciones, márgenes de beneficios, etc. etc..
![[Img #5191]](upload/img/periodico/img_5191.jpg)
¿Por qué les dicen estas cosas? Por dinero. Aunque todos trabajamos por dinero, creo que existe un código deontológico no escrito que debemos de seguir o dicho de otro modo existen formas correctas y formas incorrectas de conseguirlo. El franquiciado siempre “paga” y no poco, por entrar a formar parte del grupo. Paga canon de entrada, paga por el stock (que evidentemente le suele servir la franquicia o el proveedor de la misma), paga royalties, etc. etc., con lo cual y aunque el franquiciado tenga que cerrar su negocio, la franquicia siempre “gana”.
¿Podemos hacer algo nosotros, como profesionales del sector? Seguir trabajando como verdaderos profesionales y propagar que este trabajo tiene mucho de “especialización”, cuanto menos para que se nos respete y para que la gente emprendedora que desee iniciarse en este trabajo, que tiene todos mis respetos, sea consciente de la realidad y no se dejen embaucar fácilmente.
¿Alguien puede hacer algo frente a estos señores que actúan de esta forma? Mmmm, SI.
La verdad es que sí hay alguien, las “compañías aseguradoras”. Porque las Cías. de seguros aconsejan a sus asegurados que acudan a este o aquel profesional. En una póliza de hogar, ¿enviarían a un aprendiz de fontanero, si no va acompañado de un experto, a reparar la avería a un asegurado?, en una póliza de salud, ¿dejarían que experimentara un cirujano en sus primeras operaciones con sus asegurados?, entonces ¿por qué en una póliza de autos dejan a sus clientes desamparados con algún determinado taller de estas franquicias? es muy sencillo, por “desconocimiento”. En caso de saberlo, no creo que quisieran aconsejar a sus asegurados, o mejor aún, llevar su propio coche a un taller cuyo “técnico”, dejo claro que también es otra víctima, tiene un bagaje profesional de 15 días.
En conclusión, la franquicia lanza el mensaje engañoso a su futuro franquiciado, y a la compañía, a los cuales les vende que su red está compuesta por verdaderos profesionales, como decía un conocido mío... “la meto a la entrada y a la salida”.
Francisco Villena Callado
Cristalero “de profesión”












marina | Jueves, 15 de Noviembre de 2012 a las 14:57:13 horas
Muy bien compañero yo no lo podría haber planteado mejor, pero pienso que las cias deberían pararse a pensar que clase de publicidad van a obtener de cada cliente CABREADO. Todos sabemos que funciona el boca a boca.
Primero el cliente no repite, o vuelve al taller cabreado y reclamando la chapuza que se le ha hecho (entra agua, hace ruido), para que se la arreglen, desde luego NO recomienda el taller a nadie, con lo cual perdida de cartera de clientes, segundo llamo a la cia para ver que clase de taller me ha mandado. Con lo cual para la renovación del seguro se plantean cambiar de Cia, Eso les deberían de preocupar las cias a la hora de concertar a las plataformas a que clase de talleres son a los que dan de alta; a especialistas profesionales de la cristalería con un mínimo de experiencia, o a talleres de lavados, ruedas, cambios de aceite chapa etc. Por que parece que todo el mundo sabe poner lunas ¡¡¡A CLARO COMO CON 15 DIAS ES SUFICIENTE!!!….
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