Una empresa de alquiler de coches canadiense estafó a cientos de clientes con falsas roturas de parabrisas

La autoridades canadienses han revelado uno de los mayores fraudes en el sector de la cristalería del automóvil de la última década. Unos empleados de la empresa de alquiler de automóviles Budget de Vancouver ha sido denunciada por haber engañado a cientos de clientes en los últimos años al facturarles cambios de parabrisas que jamás se han realizado.

Los ex empleados aseguran que estafa de la empresa de alquiler de coches consistía en llamar a los clientes tras haber dejado el vehículo y asegurarles que tras dejar el coche se había comprobado que el parabrisas tenía una fisura no reparable y que tenían que sustituirlo. “Se ha robado dinero a la gente. He visto a gente llorar porque no podían pagar una sustitución de 1.000 dólares. La empresa rompía el parabrisas y con la rotura volvía a alquilar el vehículo. Si ese cliente no se daba cuenta y no reclamaba que había un desperfecto se le facturaba después también otra sustitución. El precio que se daba de 1.000 dólares era mentira ya que valía 300”, asegura Martin Torres, ex empleado de la empresa.

Los ex empleados afirman que la mayoría de los fraudes “se hacían con turistas extranjeros”. La estrategia es sencilla ya que al tener los datos de la tarjeta y haber firmado el contrato lo primero que se hacía era hacerles un cargo a su banco y una vez cobrado ya sólo les quedaba reclamar, pero el dinero ya estaba en la cuenta de la empresa de alquiler y el turista debe iniciar acciones desde su país con la consiguiente dificultad.