Fue despedido en julio de 2009 pero los denunciantes aseguran que captó supuestamente parte de su clientela por su elevada posición en Guardian
El ex delegado territorial de Guadian Express Cádiz es juzgado por estafas cometidas con falsos seguros en la época que trabajaba en la red
El Juzgado nº 2 de Jerez (Cádiz) está juzgando a Carlos Bellido, ex
delegado territorial de Guardian Express. Bellido fue el responsable de la red
de reparación y sustitución de lunas en la provincia andaluza hasta que en
julio de 2009 fue detenido por un presunto delito de estafa, apropiación
indebida, falsedad documental y simulación contractual. El Ministerio Fiscal pide nueve años de prisión para
Carlos B.N -en prisión preventiva desde 2009- y cuantifica en 2,5 millones de
euros el montante global de la presunta estafa, que dejó pérdidas desde los
2.000 a los 180.000 euros por persona
El que fuera trabajador y apoderado de Guardian Express fue denunciado por
cerca de un centenar de personas que contrataron unos productos financieros que
supuestamente estaban vinculados a la firma de seguros Axa y que al final
resultaron ser falsos. El hombre de confianza de la multinacional Guardian en
Cádiz simultaneó su función de delegado territorial de la red de talleres de
lunas con su labor con agente de seguros de AXA.
Bellido captó supuestamente parte de su clientela por su elevada posición
en Guardian, publica el Diario de Jerez. "Hacía las pólizas a través de
relaciones sociales de confianza. Le funcionaba bien el 'boca a boca', es un
tipo abierto", asegura un afactado
Bellido consiguió un puesto de responsabilidad en Guardian Express a pesar
de que ya contaba con antecedentes por estafa, señalan perjudicados por el
fraude. Son anteriores a la época en la el imputado comenzó a trabajar como
delegado territorial de Guardian Express -que despidió a Bellido en julio de
2009 - donde captó a numerosa clientela mediante el boca a boca. Los
antecedentes de Bellido son otro de los indicios negativos que pesan contra el
imputado.
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De todas formas, a pesar de despedir a Carlos Bellido en julio de 2009, no
fue revocado como apoderado de la empresa hasta el 30 de octubre de 2009 como
recoge el Registro Mercantil de
Álava-Araba. Datos registrales: Tomo
1418, Folio 20, Sección 8, H VI 5251, I/A 17
Su puesto en Guardian generaba confianza
Francisco Bellido, aseguran afectados de Jerez, invitaba a comer
langostinos de Sanlúcar y medallones de retinto a sus empleados de Guardian
Express en bares del centro, seguía, presuntamente, haciendo pólizas incluso
después de ser denunciado por una doble vía (Rota y Jerez), según mantienen los
afectados. "Es un máquina. Le vende un salvavidas a un pato".
Así describe Paco (a secas), uno de los afectados por la estafa con pólizas de
inversión al
comercial presuntamente implicado, Carlos Bellido, "una
persona llana y agradable" Bellido, espléndido y generoso (probablemente
con el dinero de los demás), invitaba a "todo confort" a sus clientes
en las casetas más pijas. Un tipo con arte y con cara b de disco que "si
se hubiera dedicado a negocios legales sería un triunfador", añade Paco.
La excesiva confianza generada por los consejos de amigos y familiares y
por las palabras de Carlos Bellido motivó que numerosas personas contrataran
unos productos financieros que supuestamente estaban vinculados a la firma de
seguros Axa y que al final resultaron ser falsos. Algunos de los afectados,
concretamente seis, pasaron ayer por la sala de vistas de la Audiencia
Provincial para declarar durante la segunda sesión del juicio que se inició el
martes contra el presunto responsable de este fraude, aunque no serán los
únicos ya que está previsto que el 'paseo' de víctimas continúe en próximos
días (a la vista aún le resta siete jornadas).
Trabajaba en AXA al mismo tiempo que en Guardian
Bellido relató en el juicio que empezó su
relación laboral con la compañía aseguradora AXA, como subagente en 1997. Ya
llevaba otros tres años en el ámbito de los seguros, por lo que se llevó su
“cartera” de clientes.
Sin embargo, como explicó, pese a cesar su actividad dos años más tarde ante el
“decadencia” del sector, continuó colaborando “constantemente” durante
una década como “favor” con esta compañía, desde donde le pidieron que “les
ayudara a cumplir los objetivos para que los clientes no se borraran”.
Él mismo aclaró ayer que compatibilizaba esta tarea con la de su otro trabajo
“buscando el tiempo”. Para ello, como precisó, la propia compañía de seguros le
proporcionaba los “documentos originales” con los que admitió que llegó a
“falsificar” pólizas.
Fichó en la red de lunas con antecedentes
No obstante, advirtió que durante estos 10 años que se dedicó a contratar
pólizas, en su mayoría de inversión, “no buscaba beneficios ni tenía
porcentajes” sino que lo hacía “favor por favor”.
De hecho, resaltó que fruto de la relación de “afinidad” y de “confianza” con
esta compañía tenía acceso a información confidencial como el número de cuenta
de las pólizas de inversión y el resto de productos que contrataba.
Según el procesado, el origen de sus
problemas se remite a a 1998 cuando “retuvo” dinero de AXA para pagar una
deuda de casi 6.000 euros, operación que volvió a hacer para “tapar
huecos”. A partir de ahí, todo “creció de una manera...” se lamenta, que
no pudo dar marcha atrás. “Cuando me di cuenta estaba en un embolao y la
bola era tan grande que era imparable pero mi intención jamás fue engañar a
nadie”.
El Juzgado nº 2 de Jerez (Cádiz) está juzgando a Carlos Bellido, ex delegado territorial de Guardian Express. Bellido fue el responsable de la red de reparación y sustitución de lunas en la provincia andaluza hasta que en julio de 2009 fue detenido por un presunto delito de estafa, apropiación indebida, falsedad documental y simulación contractual. El Ministerio Fiscal pide nueve años de prisión para Carlos B.N -en prisión preventiva desde 2009- y cuantifica en 2,5 millones de euros el montante global de la presunta estafa, que dejó pérdidas desde los 2.000 a los 180.000 euros por persona
El que fuera trabajador y apoderado de Guardian Express fue denunciado por cerca de un centenar de personas que contrataron unos productos financieros que supuestamente estaban vinculados a la firma de seguros Axa y que al final resultaron ser falsos. El hombre de confianza de la multinacional Guardian en Cádiz simultaneó su función de delegado territorial de la red de talleres de lunas con su labor con agente de seguros de AXA.
Bellido captó supuestamente parte de su clientela por su elevada posición en Guardian, publica el Diario de Jerez. "Hacía las pólizas a través de relaciones sociales de confianza. Le funcionaba bien el 'boca a boca', es un tipo abierto", asegura un afactado
Bellido consiguió un puesto de responsabilidad en Guardian Express a pesar de que ya contaba con antecedentes por estafa, señalan perjudicados por el fraude. Son anteriores a la época en la el imputado comenzó a trabajar como delegado territorial de Guardian Express -que despidió a Bellido en julio de 2009 - donde captó a numerosa clientela mediante el boca a boca. Los antecedentes de Bellido son otro de los indicios negativos que pesan contra el imputado.
De todas formas, a pesar de despedir a Carlos Bellido en julio de 2009, no fue revocado como apoderado de la empresa hasta el 30 de octubre de 2009 como recoge el Registro Mercantil de Álava-Araba. Datos registrales: Tomo 1418, Folio 20, Sección 8, H VI 5251, I/A 17
Su puesto en Guardian generaba confianza
Francisco Bellido, aseguran afectados de Jerez, invitaba a comer
langostinos de Sanlúcar y medallones de retinto a sus empleados de Guardian
Express en bares del centro, seguía, presuntamente, haciendo pólizas incluso
después de ser denunciado por una doble vía (Rota y Jerez), según mantienen los
afectados. "Es un máquina. Le vende un salvavidas a un pato".
Así describe Paco (a secas), uno de los afectados por la estafa con pólizas de
inversión al comercial presuntamente implicado, Carlos Bellido, "una
persona llana y agradable" Bellido, espléndido y generoso (probablemente
con el dinero de los demás), invitaba a "todo confort" a sus clientes
en las casetas más pijas. Un tipo con arte y con cara b de disco que "si
se hubiera dedicado a negocios legales sería un triunfador", añade Paco.
La excesiva confianza generada por los consejos de amigos y familiares y
por las palabras de Carlos Bellido motivó que numerosas personas contrataran
unos productos financieros que supuestamente estaban vinculados a la firma de
seguros Axa y que al final resultaron ser falsos. Algunos de los afectados,
concretamente seis, pasaron ayer por la sala de vistas de la Audiencia
Provincial para declarar durante la segunda sesión del juicio que se inició el
martes contra el presunto responsable de este fraude, aunque no serán los
únicos ya que está previsto que el 'paseo' de víctimas continúe en próximos
días (a la vista aún le resta siete jornadas).
Trabajaba en AXA al mismo tiempo que en Guardian
Bellido relató en el juicio que empezó su relación laboral con la compañía aseguradora AXA, como subagente en 1997. Ya llevaba otros tres años en el ámbito de los seguros, por lo que se llevó su “cartera” de clientes.
Sin embargo, como explicó, pese a cesar su actividad dos años más tarde ante el “decadencia” del sector, continuó colaborando “constantemente” durante una década como “favor” con esta compañía, desde donde le pidieron que “les ayudara a cumplir los objetivos para que los clientes no se borraran”.
Él mismo aclaró ayer que compatibilizaba esta tarea con la de su otro trabajo
“buscando el tiempo”. Para ello, como precisó, la propia compañía de seguros le
proporcionaba los “documentos originales” con los que admitió que llegó a
“falsificar” pólizas.
Fichó en la red de lunas con antecedentes
No obstante, advirtió que durante estos 10 años que se dedicó a contratar
pólizas, en su mayoría de inversión, “no buscaba beneficios ni tenía
porcentajes” sino que lo hacía “favor por favor”.
De hecho, resaltó que fruto de la relación de “afinidad” y de “confianza” con esta compañía tenía acceso a información confidencial como el número de cuenta de las pólizas de inversión y el resto de productos que contrataba.
Según el procesado, el origen de sus problemas se remite a a 1998 cuando “retuvo” dinero de AXA para pagar una deuda de casi 6.000 euros, operación que volvió a hacer para “tapar huecos”. A partir de ahí, todo “creció de una manera...” se lamenta, que no pudo dar marcha atrás. “Cuando me di cuenta estaba en un embolao y la bola era tan grande que era imparable pero mi intención jamás fue engañar a nadie”.
florazul | Jueves, 07 de Marzo de 2013 a las 15:54:47 horas
vengaaa, a mangar que asi se aregla el pais....estos de corbatita que despues se dedican a machacar al trabajador honrado...pero lo mejor de todo que gracias a las blandas leyes que hay aqui en españa si no es por un motivo es por otro y salen inpugnes de todos los delitos....ferran, barcenas, urdangarin, etc, etc...deberian ver si hay alguna escuela para delinquir en españa, porque estan todos de medalla de honor.....joeee...si recuperaran todo lo que saquearon no habria crisis, y todo el mundo viviria mas en armonia.
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