La subida de las pólizas podría acabar con la presión excesiva a los talleres

El anuncio del fin de la baja de precios de las pólizas y la intención de comenzar una escalada de precios es una magnífica noticia para el sector de los talleres.

Si hay un sector que ha vivido ahogado en época de crisis debido a la guerra de precios entre las compañías aseguradoras ha sido el de los talleres. Las aseguradoras necesitaban conseguir un margen de beneficio y sus proveedores han sido los perjudicados en esa búsqueda de margen.

El coste medio se ha convertido en una obsesión y ese coste medio ha repercutido negativamente en el sector de la cristalería. El actual promedio de coste por un siniestro de lunas ya es casi imposible de conseguir sin amenazar seriamente la supervivencia de los talleres.

El aumento del precio de las pólizas es una necesidad perentoria para los talleres, al menos para que no se sigan reduciendo los costes medios.

En el sector se ha vivido una dualidad muy peligrosa que es un precio muy bajo por siniestro y una frecuencia siniestral que ha pasado del 8,4% en 2010 al 6,7% en 2013. Si a eso únicos que el volumen total de siniestros ha caído un 30% en los últimos cuatro años, conseguir ganar dinero se está convirtiendo en una misión imposible. La tendencia a descuentos excesivos no puede continuar y esperemos que sea a través de la subida de precios de las pólizas cuando comience a verse la luz al final del túnel.