Indemnizan con 15,7 millones de euros a una conductura por una mala instalación del parabrisas

Un día tenía que llegar una sentencia ejemplar en la que una mala instalación de un parabrisas fuera la causa de un accidente o de una grave lesión o muerte de algún ocupante.

Eso ha pasado en la localidad estadounidense de Roanoke, en el estado de Virginia, donde una conductora ha sido indemnizada con 20 millones de dólares (15,7 millones de euros) por sufrir una minusvalía a causa de un parabrisas mal instalado que no soportó el peso del techo del vehículo.

Mazda, fabricante de vehículos, ha sido declarado culpable de la minusvalía que afectará de por vida a Shannon Walters de 35 años, que sufrió un grave accidente tras dar vueltas de campaña y ver cómo el techo cedía con demasiada facilidad y la aplastaba.

Esta sentencia sentará jurisprudencia en Estados Unidos y a partir de ahora, cualquier víctima que considere que una mala instalación es la culpable de una lesión podría ser indemnizada de manera millonaria.