Se trata de autobuses en servicio en Asturias y lo vinculan a la huelga de los trabajadores
Alsa denuncia la rotura de lunas en nueve autobuses que ascienden a 8.200 euros
La empresa de autobuses
Alsa ha presentado una denuncia por los asaltos que la tarde del 23 de
diciembre sufrieron nueve vehículos que estaban cubriendo líneas regulares en
el centro de Asturias, en concreto, rutas entre Oviedo, Gijón, Avilés, Carreño
y Villaviciosa. Como resultado de estos ataques, nueve vehículos terminaron con
cristales rotos, siete con las lunas traseras destrozadas y dos con las
laterales. La compañía, que vincula lo ocurrido con la huelga convocada por los
trabajadores para el próximo 12 de enero, lamenta los daños materiales, que en
este caso ascienden a 8.200 euros, pero también teme que este tipo de
actos puedan terminar acarreando daños personales irreparables.
Alsa considera "injustificado y una
sinrazón la utilización de la violencia y la fuerza ante un conflicto laboral
que debe buscar su solución a través del dialogo y la negociación". La
empresa de autobuses asegura que, siempre que hay una convocatoria de huelga o
conflicto laboral en marcha en Asturias,
"los vehículos son
objeto de actos vandálicos" sin que los autores sean conscientes "del
riesgo que corren de ocasionar daños personales irreparables". Lamentan
que nunca se hayan generado, hasta ahora, responsabilidades penales para los
autores.
Alsa vincula el asalto a nueves autobuses a la próxima
huelga convocada. La compañía afirma que el único motivo real que ha
generado este paro es la exigencia de la readmisión de un trabajador,
miembro de UGT en el comité de empresa. Según su versión este empleado
acordó su despido "tras ser descubierto sustrayendo gasoil para uso
particular de una tercera persona en una estación de servicio de Asturias, con
cargo a la empresa, en noviembre".
La empresa de autobuses Alsa ha presentado una denuncia por los asaltos que la tarde del 23 de diciembre sufrieron nueve vehículos que estaban cubriendo líneas regulares en el centro de Asturias, en concreto, rutas entre Oviedo, Gijón, Avilés, Carreño y Villaviciosa. Como resultado de estos ataques, nueve vehículos terminaron con cristales rotos, siete con las lunas traseras destrozadas y dos con las laterales. La compañía, que vincula lo ocurrido con la huelga convocada por los trabajadores para el próximo 12 de enero, lamenta los daños materiales, que en este caso ascienden a 8.200 euros, pero también teme que este tipo de actos puedan terminar acarreando daños personales irreparables.
Alsa considera "injustificado y una
sinrazón la utilización de la violencia y la fuerza ante un conflicto laboral
que debe buscar su solución a través del dialogo y la negociación". La
empresa de autobuses asegura que, siempre que hay una convocatoria de huelga o
conflicto laboral en marcha en Asturias,
"los vehículos son
objeto de actos vandálicos" sin que los autores sean conscientes "del
riesgo que corren de ocasionar daños personales irreparables". Lamentan
que nunca se hayan generado, hasta ahora, responsabilidades penales para los
autores.
Alsa vincula el asalto a nueves autobuses a la próxima huelga convocada. La compañía afirma que el único motivo real que ha generado este paro es la exigencia de la readmisión de un trabajador, miembro de UGT en el comité de empresa. Según su versión este empleado acordó su despido "tras ser descubierto sustrayendo gasoil para uso particular de una tercera persona en una estación de servicio de Asturias, con cargo a la empresa, en noviembre".












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