Los expertos coinciden en señalar los problemas que van a suponer las lunas panorámicas de hasta 4 metros cuadrados que llegan al mercado
"Va a ser todo un reto saber instalar correctamente los nuevos parabrisas"
La localidad estadounidense de Reno está acogiendo estos días una nueva edición de la Autoglass Week, el congreso más importante del sector de la cristalería del automóvil. Uno de los principales retos que se están afrontando es analizar cómo afectará al futuro de los profesionales la llegada de nuevos vidrios con más tamaño, más ligereza, cámaras y sensores.
![[Img #11032]](upload/img/periodico/img_11032.jpg)
La conclusión de los expertos que han participado es que será más complicado la correcta instalación y los talleres se enfrentan, incluso, a problemas legales por malas instalaciones que pueden suponer un impacto en la seguridad.
Gerry Parij, de Saint gobain Sekurit Internacional, afirmó que “los parabrisas son cada vez de mayor tamaño. Se están viendo lunas de 2,5 metros cuadrados pero es que llegan los de 4
metros cuadrados como el caso del Tesla X. Está claro que va a ser todo un reto conseguir instalar correctamente los nuevos parabrisas”.
En cuanto a la calibración de las cámaras, hay numerosas interrogantes. “No estamos seguros qué coches necesitan calibración y cuáles no. ¿cuál es el coste de estas calibraciones?. Hemos escuchado incluso que si no es vidrio de origen nos e podrá calibrar…”, asegra Bob Beranek, de Automotive Consulting.
![[Img #11034]](upload/img/periodico/img_11034.jpg)
Incluso, los talleres, según Beranek “deben consultar con abogados sobre las posibles responsabilidades por las malas calibraciones”.
Fuente: Glassbytes
La localidad estadounidense de Reno está acogiendo estos días una nueva edición de la Autoglass Week, el congreso más importante del sector de la cristalería del automóvil. Uno de los principales retos que se están afrontando es analizar cómo afectará al futuro de los profesionales la llegada de nuevos vidrios con más tamaño, más ligereza, cámaras y sensores.
La conclusión de los expertos que han participado es que será más complicado la correcta instalación y los talleres se enfrentan, incluso, a problemas legales por malas instalaciones que pueden suponer un impacto en la seguridad.
Gerry Parij, de Saint gobain Sekurit Internacional, afirmó que “los parabrisas son cada vez de mayor tamaño. Se están viendo lunas de 2,5 metros cuadrados pero es que llegan los de 4 metros cuadrados como el caso del Tesla X. Está claro que va a ser todo un reto conseguir instalar correctamente los nuevos parabrisas”.
En cuanto a la calibración de las cámaras, hay numerosas interrogantes. “No estamos seguros qué coches necesitan calibración y cuáles no. ¿cuál es el coste de estas calibraciones?. Hemos escuchado incluso que si no es vidrio de origen nos e podrá calibrar…”, asegra Bob Beranek, de Automotive Consulting.
Incluso, los talleres, según Beranek “deben consultar con abogados sobre las posibles responsabilidades por las malas calibraciones”.
Fuente: Glassbytes
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