Redacción Infoluna
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Lunes, 19 de Octubre de 2015
El Discovery Sport incluye 43 sensores
Land Rover estrena un modelo que determina la intensidad de la luz que pasa por la luna para regular el aire acondicionado
Land Rover da un golpe de efecto definitivo con el Discovery Sport, dotándolo con todo un conjunto de avanzadas tecnologías para mejorar la seguridad, el confort, y la vida a bordo del vehículo. Este SUV Premium cuenta con 43 nuevos sensores capaces de medir y controlar casi cualquier dato importante como la intensidad de los rayos del sol, la calidad del aire, o el vaho generado por la lluvia en el interior del parabrisas.
El Discovery Sport cuenta con un sensor de luz solar en el salpicadero capaz de medir la intensidad de los rayos solares cada 200 milisegundos. De esta manera, el sistema de climatización puede contrastar la intensidad del calor que genera la luz sobre la luna delantera, para ajustar el aire acondicionado y regular la temperatura interior automáticamente.
![[Img #11105]](upload/img/periodico/img_11105.jpg)
El sensor de lluvia, hace desaparecer el vaho interior en caso de lluvia o diferencia de humedad entre el interior y el exterior. Todo, sin que el conductor tenga que mover ni un dedo. Para aquellos que les guste la aventura y disfruten llevando a su Discovery a la montaña, la unidad de control Sensing Wade (sensor de vadeo), mide la profundidad del agua gracias a unos sensores colocados bajo los retrovisores.
En caso de que el vehículo se aproxime a su profundidad máxima de vadeo, éste emite una señal sonora de advertencia. Tampoco podía faltar un sistema de Frenada Automática de Emergencia, el identificador de señales o el aviso de cambio de carril involuntario, controlados por una cámara estereoscópica. Ésta misma, regula el cambio de luces automáticamente para evitar deslumbrar a otro conductor.
De forma similar, el retrovisor interior tiene un dispositivo de atenuación automática que ajusta y mantiene el brillo óptimo para que otro vehículo no deslumbre al conductor, siempre teniendo también en cuenta las condiciones lumínicas de la carretera. El sistema Active Driveline desactiva la tracción del eje trasero cuando se circula a más de 35 km/h, pasando de 4WD a 2WD. Pero si detecta la mínima pérdida de tracción o el conductor acelera de forma brusca, en 300 milisegundos se vuelve a activar la tracción en las cuatro ruedas.
Además, el sistema también puede ajustar la entrega de par para las ruedas de cada lado al abordar una curva, mejorando la motricidad y adherencia tanto de las ruedas del lado interior como del exterior.
Land Rover da un golpe de efecto definitivo con el Discovery Sport, dotándolo con todo un conjunto de avanzadas tecnologías para mejorar la seguridad, el confort, y la vida a bordo del vehículo. Este SUV Premium cuenta con 43 nuevos sensores capaces de medir y controlar casi cualquier dato importante como la intensidad de los rayos del sol, la calidad del aire, o el vaho generado por la lluvia en el interior del parabrisas.
El Discovery Sport cuenta con un sensor de luz solar en el salpicadero capaz de medir la intensidad de los rayos solares cada 200 milisegundos. De esta manera, el sistema de climatización puede contrastar la intensidad del calor que genera la luz sobre la luna delantera, para ajustar el aire acondicionado y regular la temperatura interior automáticamente.
El sensor de lluvia, hace desaparecer el vaho interior en caso de lluvia o diferencia de humedad entre el interior y el exterior. Todo, sin que el conductor tenga que mover ni un dedo. Para aquellos que les guste la aventura y disfruten llevando a su Discovery a la montaña, la unidad de control Sensing Wade (sensor de vadeo), mide la profundidad del agua gracias a unos sensores colocados bajo los retrovisores.
En caso de que el vehículo se aproxime a su profundidad máxima de vadeo, éste emite una señal sonora de advertencia. Tampoco podía faltar un sistema de Frenada Automática de Emergencia, el identificador de señales o el aviso de cambio de carril involuntario, controlados por una cámara estereoscópica. Ésta misma, regula el cambio de luces automáticamente para evitar deslumbrar a otro conductor.
De forma similar, el retrovisor interior tiene un dispositivo de atenuación automática que ajusta y mantiene el brillo óptimo para que otro vehículo no deslumbre al conductor, siempre teniendo también en cuenta las condiciones lumínicas de la carretera. El sistema Active Driveline desactiva la tracción del eje trasero cuando se circula a más de 35 km/h, pasando de 4WD a 2WD. Pero si detecta la mínima pérdida de tracción o el conductor acelera de forma brusca, en 300 milisegundos se vuelve a activar la tracción en las cuatro ruedas.
Además, el sistema también puede ajustar la entrega de par para las ruedas de cada lado al abordar una curva, mejorando la motricidad y adherencia tanto de las ruedas del lado interior como del exterior.
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