Copiando el modelo que ya impera en países con altos volúmenes de vehículos con sistemas ADAS
El próximo negocio en el sector de lunas serán las unidades móviles de calibración de cámaras
El futuro negocio en el sector de la cristalería del automóvil será la creación de unidades móviles de calibración de cámaras, pero no como se entiende actualmente este servicio en cuanto a ir a cambiar o reparar lunas sino para sellar definitivamente ese trabajo y entregar el vehículo al cliente en el taller.
Copiar el modelo de Reino Unido o Francia, con empresas que se han especializado en el calibrado de cámaras, será un negocio próspero a medio plazo, ya que se espera que a partir de 2018 todos los vehículos salgan de serie con
el sistemas ADAS incorporado.
Para el taller, como sucede en el resto de Europa, será beneficioso confiar en una empresa que les ofrezca este servicio y con la que puedan compartir beneficios y reducir inversión en la compra de herramientas caras y renovaciones de software anuales.
Los talleres oficiales serán la gran fuente de negocio de estas unidades móviles, ya que la mayoría de los propietarios de vehículos nuevos suelen confiar a estos centros las reparaciones en los primeros cincoa años de vida del vehículo. Estos talleres no tienen técnicos formados en calibración y tendrán que invertir en máquinas de diagnosis, por lo que les saldrá más barato confiar en proveedores externos y cobrar altas tarifas por ese sevicio.
Esta solución será habitual en unos años y quien apueste por ella como nuevo negocio tiene visos de ser muy rentable en el momento que el volumen de siniestros sea alto y se defina el precio extra que pagarán las compañías de seguros.
El futuro negocio en el sector de la cristalería del automóvil será la creación de unidades móviles de calibración de cámaras, pero no como se entiende actualmente este servicio en cuanto a ir a cambiar o reparar lunas sino para sellar definitivamente ese trabajo y entregar el vehículo al cliente en el taller.
Copiar el modelo de Reino Unido o Francia, con empresas que se han especializado en el calibrado de cámaras, será un negocio próspero a medio plazo, ya que se espera que a partir de 2018 todos los vehículos salgan de serie con el sistemas ADAS incorporado.
Para el taller, como sucede en el resto de Europa, será beneficioso confiar en una empresa que les ofrezca este servicio y con la que puedan compartir beneficios y reducir inversión en la compra de herramientas caras y renovaciones de software anuales.
Los talleres oficiales serán la gran fuente de negocio de estas unidades móviles, ya que la mayoría de los propietarios de vehículos nuevos suelen confiar a estos centros las reparaciones en los primeros cincoa años de vida del vehículo. Estos talleres no tienen técnicos formados en calibración y tendrán que invertir en máquinas de diagnosis, por lo que les saldrá más barato confiar en proveedores externos y cobrar altas tarifas por ese sevicio.
Esta solución será habitual en unos años y quien apueste por ella como nuevo negocio tiene visos de ser muy rentable en el momento que el volumen de siniestros sea alto y se defina el precio extra que pagarán las compañías de seguros.
kiko | Miércoles, 16 de Diciembre de 2015 a las 16:03:42 horas
Normal que los talleres de lunas que no adquieran la maquina busque un proveedor que lo haga por ellos.Esto no va a suponer tanto problema como "algunos" pensaban.
Accede para responder