"El taller no me avisó del peligro de no calibrar, el ADAS falló y el coche cambió al carril del sentido contrario"

Un conductor canadiense se convirtió en protagonista del informativo del principal canal de televisión de su país tras denunciar una situación de enorme riesgo de accidente tras el reemplazo del parabrisas de su vehículo Honda, como informa el canal CBC

Mike Ash asegura que acudió a un taller de la red Speedy Glass a causa de una raja en la luna de su vehículo, se le cambió la pieza pero no se recalibró la cámara que llevaba y que garantiza el buen funcionamiento de los Sistemas Avanzados de Asistencia al Conductor (ADAS). 

Una vez fuera del taller, el cliente asegura que cuando iba circulando por una carretera el vehículo actuó de manera autónoma y cambio de carril. El riesgo de accidente fue notorio ya que al fallar el detector de carril se cambió la dirección y el vehículo se situó en el carril de los vehículos que circulaban en sentido contrario. El cliente afirma que le dio tiempo a reaccionar y no impactar con otro vehículo pero que pasó mucho miedo al comprobar que su vehículo tomaba una decisión equivocada debido a la falta de recalibración de la cámara. "Fue una situación sorprendente, el coche tiraba de mi hacia el  carril contrario, pero por suerte pude reaccionar. En el taller no me avisaron del peligro en ningún momento", asegura Mike Ash.

Tras este incidente, Mike Ash acudió al taller a pedir explicaciones y su responsable le señaló un apartado de la factura en la que el taller avisaba de que habría recalibrado la cámara y que se eximía de responsabilidad. Sin embargo, expertos legales en temas de seguridad vial aseguran que esta cláusula no es suficiente para evitar un posible litigio, ya que no se avisa al cliente de manera clara de las posibles consecuencias que puede tener dejar sin recalibrar la cámara que asegura el funcionamiento de los sistemas ADAS.

Este hecho no es el primero que se conoce sobre un fallo de los sistemas ADAS tras un reemplazo de parabrisas, pero sí la primera vez que adquiere notoriedad informativa. El cliente canadiense que estuvo a punto de accidentarse debido a la ausencia de recalibración está estudiando una posible demanda por negligencia del taller, pese a que firmó la cláusula que eximía de responsabilidad al centro de cristalería del automóvil.