INFOLUNA se pone en contacto con numerosos talleres que coinciden en el mal inicio de año en volumen de trabajo

¿Por qué ha bajado el trabajo en los talleres de lunas en 2019 y qué soluciones se pueden aplicar?

"Menos mal que abril ha mejorado un poco el trabajo porque los tres primeros meses no han sido buenos". Así resumen varios cristaleros con los que INFOLUNA se ha puesto en contacto para valorar los primeros meses de trabajo en 2019 en los talleres de cristalería del automóvil. 

 

 

 

 

INFOLUNA ha contactado con profesionales de varias redes y todos coinciden en que tras un buen mes de enero de 2019, en febrero y marzo los resultados fueron peores que ese mismo periodo de 2018 y abril, al menos, ha revertido esa tendencia negativa.   

 

 

 

 

 

 

 

 

¿Por qué ha bajado el volumen de trabajo en los primeros meses de 2019? La principal razón es la reducción de la movilidad debido al alto precio del combustible. Se han recorriendo menos kilómetros de media y eso hace que las posibilidades de impacto en el parabrisas se reduzcan.   

 

 

 

 

 

En estas circunstancias los talleres deben buscar una alternativa para sobrevivir y la que se ha convertido en la mejor opción es conseguir atraer al cliente a través de todas las opciones comerciales posibles.   

 

 

 

 

 

 

 

 

Los talleres son cada vez más activos en las campañas conjuntas con corredores y mediadores en campañas de imprimación y revisión gratuita de la luna y deben multiplicar esas acciones para atraer clientela.  

 

 

 

 

 

Estas acciones conjuntas con los mediadores y corredores son una de las posibles soluciones pero en el sector todos coinciden que la única vía de salvación para mantener las cuentas estables pasan por los regalos. La mejor manera de convencer al cliente es ofrecerle incentivos a través de promociones.  

 

 

 

"Si el año 2019 sigue igual de flojito ni me lo voy a pensar, daré buenos regalos para sobrevivir", nos confiesa un cristalero que asegura vivir rodeado de talleres que le hacen una competencia desleal. "Estoy cansado de ver como el taller de chapa de mi zona, que no sabe ni cambiar una luna recibe muchos clientes porque recibe un cheque de 50 euros en metálico y yo tengo que soportar un coste medio bajísimo y sin apenas margen", afirma contundente este profesional andaluz.