"Estamos dando citas con 8 semanas para cambiar la luna...y gracias"

El mercado internacional de distribución de vidrio para el automóvil está sumido en una peligrosa crisis que ya está afectando a algunos países y que va a azotar en breve a otros como España y el resto de Europa.

Donde ya está haciendo estragos esa falta de vidrio es en Estados Unidos, como refleja la prestigiosa web Komonews que avisa a los consumidores del problema al que se van a enfrentar si buscan una cita para cambiar su parabrisas.

Según remarca la web americana "los parabrisas de los automóviles tienen actualmente una gran demanda. Están pasando cosas que nadie esperaba. El propietario de una empresa de reparación de parabrisas de Seattle aseguró que había conducido hasta ocho horas para encontrar reemplazos para su taller".

Mike Carey, técnico de un taller de Seattle recalca el enorme problema al que se enfrenta el sector: "Hay personas  que van a tener que esperar hasta ocho semanas para que le cambiemos la luna debido a la escasez de material...y gracias".

"Es que no hay apenas stock de ninguna marca, a los clientes hay que pedirles paciencia porque tardan mucho en traernos el material y no podemos hacer nada. Estos es un drama y no sabemos cuándo va a solucionarse", señala el técnico.

"Al igual que todos los demás materiales de nuestra industria en este momento, el vidrio no se encuentra por ningún lado y no sabemos porqué pasa esto", asegura Nate Simmons de Marqueen Garage en Queen Anne.

Glassma, distribuidor de vidrio para el automóvil explica la razón del problema: "Durante la pandemia los negocios de vidrio cerraron y la fabricación se detuvo. Y ha habido escasez de oferta y una demanda creciente desde entonces. Para los clientes, ha sido frustrante. No se puede conseguir vidrio. Lo que va a pasar es que faltarán piezas y se verán precios más altos".

Entre el aumento en los costos de suministro los talleres creen que se debería pagar hasta un 30 por ciento más por las reparaciones de vidrio.