Ralarsa se lanza a la 'caza' de talleres Glassdrive descontentos con su situación en la multinacional francesa

"Están revoloteando como buitres carroñeros porque tienen la sensación que Glassdrive está en descomposición". Así define un franquiciado de la red francesa la visita que recibió de una empleada de Ralarsa hace unas semanas.  

La red catalana que compró hace justo año la multinacional sueca Carey Group se ha lanzado a la 'caza' de talleres Glassdrive al considerar que hay muchos gerentes de esos talleres que se encuentran en disposición de abandonar la red y buscar una alternativa.  

En INFOLUNA nos consta que Cristina Górriz, directora de franquicias y mano derecha del ahora gerente asalariado Joan Jorge Arsalaguet, lleva tiempo recorriendo España visitando talleres de Glassdrive para saber cuál es el sentimiento de esos profesionales en un momento delicado para la multinacional francesa.  

Uno de esos responsables de un taller Glassdrive nos reconoce esta estrategia: "En mi caso se acercó a mi taller Cristina Górriz y no me ofreció nada concreto en cuanto a dinero, compra del taller o algo parecido, solo quería saber si manejaba la posibilidad de incorporarme en un futuro cercano a Ralarsa".  

La red catalana no busca invertir en la compra de talleres sino nutrirse con centros de manera gratuita que supongan en el futuro una fuente de negocio a través del royalty y la venta del material, que siempre ha sido el principal negocio de Ralarsa con sus centro franquiciados.  

El argumento que se está utilizando para convencer a los talleres Glassdrive de un posible cambio hacia Ralarsa pasa por eliminar la tarifa de entrada habitual y asegurar que el margen que van a conseguir por el material está por encima del que manejan actualmente con Autover.  

De momento esta táctica está teniendo poco éxito, pero cada vez es mayor el número de centros de Glassdrive a los que se está ofreciendo la posibilidad de entrar en Ralarsa, sobre todo en grandes poblaciones que es donde Ralarsa quiere reforzar su estructura.