"El problema no somos los reparadores de lunas que nos buscamos la vida sino las aseguradoras que engañan al cliente diciendo que no le van a subir la póliza y le meten un zasca al año siguiente"

En la polémica desatada tras la incendiaria publicación en Facebook de Pablo Álvarez González, un asegurado que denuncia que fue engañado por el taller Glassdrive de Mieres (Asturias), hemos recibido en INFOLUNA diversas opiniones, tanto a favor o en contra.  

Los cristaleros coinciden, tanto los que critican la manera de trabajar de este taller como quienes le defienden, que la culpa de todo lo que pasa la tienen las aseguradoras. "Mientras sigamos teniendo penalización por coste medio y porcentaje de reparaciones, vamos a seguir buscándonos la vida de cualquier manera. Que le cuenten eso a los asegurados. ¡Es el mercado, amigo!", nos escribe un cristalero.  

En cuanto a la actitud de las aseguradoras en el aumento de las pólizas tras una reparación, hemos racabado varios testimonios de la falta de honestidad de muchas compañías incluso cuando el servicio se realiza en un taller concertado.   

"¿Ahora resulta que la culpa de que le suban el seguro a ese señor, es de Glassdrive por hacerle una reparacion? En mi taller he tenido ya  he tenido varios casos de Allianz en los que, al abrir el expediente le llega un mensaje de la compañía al cliente informandole de que por estar en un taller concertado, la reparacion no le va a afectar en la bonificacion de la poliza y luego resulta que el agente que le lleva el seguro se lo sube y hecha la culpa a que ha tenido un parte de lunas", nos explica Manuel, un cristalero del norte de España.   

Este caso de Allianz ya no es la excepción, algunas aseguradoras se han sumado a la estrategia de subidas de precio en la póliza tras la reparación de la luna en un taller concertado.  

"Algunos clientes me han reconocido que su agente de seguros le ha dicho que le han subido este año 40 o 50 euros por haber ido a reparar la luna. Estos es una vergüenza porque venir a un taller concertado le tiene que ofrecer algunas ventajas al asegurado, pero por lo que veo algunas compañías han decidido que esa reparación que nos pagan al final les va a salir gratis con la cartera del asegurado", nos indica un cristalero madrileño.  

El problema reside en que la reparación se realiza para ahorrar costes a la saseguradoras, pero si se generalizan estas subidas en las pólizas por reparar una luna el cliente va a dejar de confiar en este servicio. "Si al final te van a subir lo mismo por una reparación que por un cambio pues los clientes lo van a tener claro y van a pedir una luna nueva", nos señala un cristalero andaluz.