"A las aseguradoras y los clientes les están colando cada vez más más lunas de desguace como si fueran de primer equipo...y hacen muy bien"

"¿Pero cómo no van a colarle cada vez más parabrisas de desguace como si fueran de primer equipo a las aseguradoras con lo que nos están pagando?". Un cristalero andaluz destapa una tendencia creciente en el sector desde que se dispararon los precios del material y eso no se vio reflejado en los costes medios.  

Esta afirmación de este profesional de la cristalería del automóvil es tan real que desde INFOLUNA nos hemos puesto en contacto con varios desguaces de varias provincias y nos han reconocido que cada vez reciben más peticiones de piezas de vidrio del automóvil por parte de profesionales del taller que buscan "buenas oportunidades".   

La reducción del margen en la pieza, que siempre ha sido el 'salvavidas' del taller de lunas, ha provocado que muchos profesionales busquen alternativas para garantizar la supervivencia de su negocio y las piezas de desguace dejan un importante beneficio en  cada trabajo.  

"En mi caso no he querido entrar en esa manera de trabajar pero sé que hay muchos compañeros que llaman mucho más a los desguaces que antes, es muy fácil colársela a la aseguradora, sobre todo si eres concertado, basta con una foto con el logo y ya pasa por luna recién comprada al concesionario", apunta el cristalero andaluz que habla de esta práctica en aumento.   

¿Y si se necesita un perito que certifique que la luna es de verdad nueva? el profesional andaluz señala que "no hay ningún problema, el perito normalmente va a hacer la vista gorda y todos lo sabemos y más ahora que las están pasando canutas...".   

Otra circunstancia que ha hecho que se dispare el uso de piezas de desguace es la limitación de stock que presentan los concesionarios. "Cada vez es más difícil encontrar piezas de origen en el taller oficial, tienen vacíos los almacenes, sobre todo en algunas marcas, así que o lo buscar en el desguace o el cliente se va porque no tienes la pieza que quiere".  

Un aspecto que delata el aumento del interés de los talleres de lunas por las piezas de desguace es que "cada vez está más cara conseguir una. Sacas margen pero ya no tanto como antes, pero sigue siendo rentable, aunque no hay demasiado stock".

Las cuentas son claras, desde hace años y medio el precio del material ha incrementado cerca de un 25% mientras que el coste medio lo ha hecho en un 5%. "Muchos piensan con lógica que si no le quieren pagar su trabajo de manera justa pues ya se lo cobrará de alguna manera...", apunta este veterano cristalero.