"Con olas de calor de 35 a 40 grados hay que trabajar con adhesivos de 30 minutos sí o sí para pegar la luna o puedes tener un grave problema después con la sustitución"

Estados Unidos es el país que siempre ha marcado el paso en el sector de cristalería del automóvil. Inventó la reparación de lunas a través de Novus Glass y ha creado múltiples procedimientos de instalación que han sido seguidos por profesionales de todo el mundo.   

La última recomendación desde Estados Unidos tiene que ver con el impacto de las olas de calor en los cambios de parabrisas. Este trabajo, al igual que el de reparación, se ven muy condicionados por el efecto de olas de calor extremo con temperaturas entre 35 y 40 grados. España es uno de los países donde más olas de calor se sufren y saber cómo trabajar en estas condiciones es clave para garantizar un servicio eficaz y seguro.   

Las organizaciones que han creado los estándares de trabajo en sustitución de lunas en Estados Unidos han lanzado una recomendación que están siguiendo cada vez más cristaleros estadounidenses y que llevado a que se dispare un tipo de adhesivo que es algo más caro que el de un o dos horas pero que es "clave para no tener sospresas desagradables cuando llega mucho calor a los talleres".   

Christopher Grafe, un reconocido cristalero estadounidense propietario de Texas Glass, señala cómo se consigue reducir los riesgos del calor cuando el calor se acerca a los 40 grados: "Muchos ya con el calor estamos utilizando uretano de SRP y y así se garantiza que el calor no afecte al trabajo. El adhesivo de 30 minutos es más avanzado, es un gran producto y se mantiene bien en este clima. Quiero que mi parabrisas se asiente lo antes posible por la seguridad de mi cliente".

Aaron Bradford, propietario de Driftwood Auto Glass en Brunswick, explica como gracias a los adhesivos de 30 minutos ha podido conseguir garantizar la seguridad del pegado no solo por los efectos del calor asfixiante sino por el impacto de la humedad: “Usamos Betaseal Xpress30 de Dupont. Gracias a este producto el pegado no se ha visto demasiado afectado por las temperaturas. Además, trabajamos rápidamente con la humedad para preservar la vida útil de las imprimaciones y el tiempo de trabajo del adhesivo".     

Chris Smith, experto en reparación y sustitución de lunas, señala que "con mucho calor trabajar con adhesivos de más de media hora supone aumentar el riesgo y la posibilidad de que falle el pegado. Lo recomendable es usar el adhesivo de media hora y acabar cuanto antes. Las olas de calor son cada vez más fuerte y largas y esta es una magnífica opción para reducir la posibilidad de llevarse luego una sorpresa desagradable".