"Después de como han fulminado a Sekurit Avilés, que se preparen Autover y Glassdrive España porque a Saint Gobain no le va a temblar el pulso..."

"Hace tres años nos tranquilizaban desde Saint Gobain España y desde la central de París y nos decían que el futuro estaba garantizado, que había pedidos suficientes y que la alternativa de convertir la fábrica en un referente en la producción de recambios era una opción viable que nos haría rentables. Ahora sabemos que todo eso era mentira y van a cerrar una fábrica que es una referencia mundial y que tiene futuro aunque digan lo contrario", comparte uno de los trabajadores de la fábrica de Sekurit en Avilés que tiene ya los días contados.

La legendaria fábrica de Saint Gobain en Avilés ya tiene fecha de caducidad. El último parabrisas después de decenas de piezas de vidrio para vehículos se fabricará el próximo 24 de mayo. Se acaba con una época en la cristalería del automóvil en España que a partir de ahora, y tras el cierre de Guardian Llodio, deja a nuestro país con solo dos de las cuatro fábricas de parabrisas que funcionaron durante décadas a pleno rendimiento.

Este trabajador con el que ha contactado INFOLUNA deja un análisis preocupante para otras empresas de Saint Gobain en España: "Está claro que a los franceses no les tiembla el pulso y si van a cerrar nuestra fábrica por dos años malos supongo que no dudarán en plantearse el cierre de otros departamentos como son la distribución de Autover o los talleres de Glassdrive".

De hecho, INFOLUNA ha recibido numerosas llamadas de cristaleros de la red de talleres francesa inquietos por el futuro de sus negocios y por la posibilidad que se llegue a plantear un desmantelamiento de esta rama de negocio de la multinacional gala.

Desde Saint Gobain se envió rápidamente un mensaje tranquilizador al resto de negocios con los que operan en España y transmitieron que se trata de un caso puntual que no se extenderá al resto de actividades de cristalería del automóvil.

Sin embargo, Saint Gobain ha demostrado que va a tener poca paciencia con las ramas de negocio que demuestren no ser rentables durante dos o tres años, como en Sekurit Avilés, por lo que en Autover y Glassdrive tienen motivos de sobra para mantenerse alerta y temer una decisión en la misma línea de la sufrida por los 160 trabajadores de Avilés.

Tanto en Autover como en Glassdrive están atravesando una etapa complicada, ya que la distribución de vidrio ha sufrido un claro descenso de ventas y la red de talleres no consigue los márgenes de beneficio esperados desde París, por lo que la advertencia del trabajador de Sekurit tiene, por desgracia, fundamento en manos de una empresa que ha perdido la paciencia a nivel mundial con los negocios que vea con escaso futuro.