"No, en un vado está prohibida hacer una calibración o una reparación de lunas pero es que tampoco se puede aparcar aunque sea el de tu propio taller"

Hace unos días compartíamos un claro ejemplo de mala praxis en un servicio de recalibración de cámaras en un centro de la red Glass Talleres en la localidad sevillana de Ecija en la que se realizaba el trabajo en el vado del taller, con luz directa natural, sin un piso estable, una pared blanca en la que colocar el panel o la distancia recomendable entre el vehículo y el panel.

A todas las irregularidades de la calibración en el centro Glass Talleres de Ecija se une otra con el uso del vado que es desconocida por muchos profesionales del sector y que se ve con mucha asiduidad aunque más para dejar aparcados coches de clientes que no caben en el interior y que se colocan de manera ilegal en la puerta del negocio.

Es ilegal trabajar calibrando una cámara o realizando una reparación de lunas pero es que tampoco está permitido utilizar ese espacio de entrada al taller como si fuera una plaza de aparcamiento, ni siquiera aunque sea el vado a nombre de ese centro que paga religiosamente al ayuntamineto de turno por tener la placa de vado de manera legal en la puerta.

Un vado es un permiso municipal que permite, a todas aquellas personas que dispongan de la placa correspondiente, invadir la acera delimitada para meter su vehículo a un garaje, un local o cualquier espacio privado. De esta manera, está terminantemente prohibido aparcar delante de uno de ellos, pues podríamos entorpecer tanto la entrada como la salida de cualquier vehículo en este área. Así queda reflejado en el artículo 91.1 del Reglamento General de Circulación (RGC), donde se establece que no podremos aparcar en una plaza que obstaculice la circulación de terceros vehículos: "La parada y el estacionamiento deberán efectuarse de tal manera que el vehículo no obstaculice la circulación ni constituya un riesgo para el resto de los usuarios de la vía, cuidando especialmente la colocación del vehículo y evitar que pueda ponerse en movimiento en ausencia del conductor".

¿Y qué pasa si aparcamos delante de nuestro propio vado?

En caso de que tengas más de un coche, y que el garaje no sea lo suficientemente grande para ambos, es bastante probable que la persona o el profesional en cuestión tenga que aparcar este segundo o tercer coche en otra localización. Una situación que habrá llevado a más de una persona a pensar si puede aparcar delante de su propio vado, pues a pesar de que la norma dicte lo contrario, no está obstaculizando la circulación de terceros vehículos porque son todos de su propiedad.

¿Por qué no puedes aparcar delante de tu propio vado?

A pesar de que esta conclusión tenga su lógica, ya que tú eres responsable de ambos coches, el reglamento es bastante claro con este tipo de casos. Según recoge el artículo 91.1C, estará prohibido aparcar el vehículo "cuando se obstaculice la utilización normal del paso de salida o acceso a un inmueble de personas o animales, o de vehículos en un vado señalizado correctamente". Por todo ello, y pese a que te estarás obstaculizando a ti mismo, no es posible aparcar tu vehículo frente a tu propio vado para ganar una plaza de aparcamiento adicional.

Aunque es más que evidente que no te vas a denunciar a ti mismo por aparcar frente a tu propio vado, las autoridades sí que podrían tomar cartas en el asunto al encontrarse con este escenario. De esta manera, todas aquellas personas que aparquen frente a su propio vado se juegan una multa económica de 200 euros y que la grúa proceda a retirar el vehículo por estar aparcado incorrectamente en el vado.

Además de la multa por mal aparacmiento, al profesional de lunas le podrían poner otra multa por trabajar en la calle cuando solo está permituido en caso de que un cliente necesite asistencia en carretera o si ese servicio se realiza bajo techo en un garaje.