Mutua Madrileña toma una decisión con los siniestros de lunas que amenaza con tener un impacto muy negativo en el futuro de los talleres de cristalería del automóvil

Durante décadas hubo una aseguradora que iba por libre respecto al resto en cuanto a los siniestros de cristalería del automóvil. Mutua Madrileña tenía una manera de trabajar con los talleres y de computar los siniestros en la pólizas que no tenía absolutamente nada que ver respecto a su competencia.

Sin embargo, los tiempos cambian para peor debido al aumento disparado de la factura en siniestros de lunas y la compañía líder en volumen de pólizas de autos ha dado un giro radical tanto en su relación con los asegurados como con los talleres.

Con los talleres de lunas ha enviado el mensaje a sus peritos para que 'convenzan' a los cristaleros de que utilicen menos recambio de origen y más aftermarket, aunque sigue manteniendo la política de descuentos que genera importantes márgenes en el profesional de la cristalería del automóvil.

El cambio más radical ha llegado con los asegurados y los partes. Hasta hace muy poco el cambio de lunas no entraba dentro de los tres partes anuales permitidos para no sufrir una subida de la póliza. La respuesta del Comunity Mánager de Mutual Madrileña en la red social 'X' deja claro que la única manera de no sumar un parte con las lunas es a través de la reparación.

El problema al incluir como parte el cambio de la luna es que el asegurado puede decidir si una pequeña raja puede esperar frente a, por ejemplo, un golpe en el parachoques o en una puerta. Hasta hace poco ningún asegurado se planteaba no ir a un taller a cambiar su luna por miedo a que le subieran la prima, pero a partir de ahora se disparara el temor a recibir una penalización en la renovación de la póliza.

Además, la filosofía de los tres partes de Mutua Madrileña tiene 'truco' ya que se utiliza siempre que esos siniestros no sumen entre todos el doble de lo que se paga anualmente en la póliza. Teniendo esto en cuenta, si en un cambio de parabrisas se utiliza recambio de origen y la factura se va a la horquilla de 500 a 1.000 euros el asegurado ya tiene un problema grave con el resto de partes.

Mutua Madrileña está promocionando la reparación entre sus asegurados esperando reducir drásticamente el volumen de cambios de parabrisas, aunque, de momento, no se plantea abandonar su modelo de descuentos en la pieza y mano de obra.