La Asociación Madrileña de Talleres le declara la guerra a los especialistas de lunas y los 'denuncia' ante las compañías de seguros

ASETRA (Asociación de Talleres de Madrid), una de las más importantes de España por número de asociados y volumen de trabajos, ha decidido declararle la guerra a los especialistas en cristalería del automóvil con una insólita petición a las compañías de seguros para que les paren los pies y defiendan los interreses de los carroceros.

 

 

 

La asociación madrileña ha enviado una carta a todas las compañías de seguros con nueve peticiones que consideran que son fundamentales para la mejora del funcionamiento futuro de sus asociados. El octavo punto se refiere a los especialistas de lunas y lo que consideran una intromisión en el trabajo diario de los carroceros.

 

 

ASETRA pide a las aseguradoras "que se tenga en cuenta que ninguna persona ajena al taller pueda acceder al mismo para realizar ningún tipo de trabajo, sin el consentimiento del taller. Con especial referencia a los especialistas en lunas".

 

 

 

La asociación madrileña incide en esa petición que "Igualmente, el taller no puede hacerse responsable de cualquier intervención externa y menos aún la no consentida por el taller. Dado que dicha intervención no constará en la factura, no gozará de la correspondiente garantía".

 

 

 

Esta iniciativa  de ASETRA es muy peligrosa ya que si es escuchada por las aseguradoras se extenderá a todos los territorios del país y afectará gravemente a los especialistas de lunas que en los últimos años con el aumento de los vehículos con la necesidad de calibración ADAS han multiplicado sus trabajos como proveedores externos de los talleres de chapa  que suelen requerir de un cambio de parabrisas para uno de sus clientes.

 

 

INFOLUNA se ha puesto en contacto con un veterano cristalero madrileño que suele facturar numerosos cambios de parabrisas en toda la comunidad gracias a la llamada de talleres que le contratan para realizar como proveedor externo un trabajo de cristalería del automóvil: "Me parece una actitud barriobajera. Como dicen por ahí, "perro no come perro", pero estos de Asetra van y nos apuñalan por hacer un trabajo que ellos no quieren hacer. Espero que las aseguradoras no entren por ahí porque no tiene ningún sentido, no le hacemos daño a nadie".

 

 

Otro aspecto que resalta este profesional de la cristalería es el económico: "A mí por cambiar una luna me pagan 100 euros limpios mientras que el taller de chapa factura 800 o 1.000 euros y se lleva un margen de 300 o 400. No sé si esa medida de acabar con gente que sabe como cambiar lunas y que sus técnicos sigan arreglando un parachoques les va a convenir a muchos talleres".

 

 

Lo que más le sorprende a este cristalero es que "pidan que el trabajo no sea responsabilidad del taller pese a que es quien emite la factura. Si me contratan como proveedor externo es porque confían en mi profesionalidad. Yo entrego un trabajo y es el taller quien debe responsabilizarse ante el cliente".